Santiago Lara: de una sentencia de muerte por un tumor a su grado en psicología

Santiago Lara ha logrado cumplir su sueño de graduarse en psicología, un logro significativo al considerar su historia de superación. A los 18 años, le diagnosticaron un tumor cerebral que lo llevó a pasar más de un año en hospitales y un año en coma. Los médicos pronosticaron que no cumpliría los veinte años. Sin embargo, ahora, como psicólogo recién licenciado, celebra haber alcanzado su meta.

En el año 2017, Santiago Lara, a la edad de 18 años, sufrió un cambio radical en su vida tras ser diagnosticado de un tumor cerebral, y lo que fue en ese momento una sentencia de muerte para él, sin saberlo, sería el comienzo de su superación contra todo pronostico: logró graduarse de psicólogo en la Universidad de Nebrija, en Madrid, España, reseñaron medios internacionales.

«Esta es la historia de un chico muy guapo y muy bien vestido que, cuando tenía 18 años, le detectaron un tumor cerebral. El chico guapo estuvo 18 meses ingresado en tres hospitales diferentes y, de los 18 meses, 12 se los pasó en coma. De hecho, los médicos le pronosticaron que no cumpliría los 20 y que moriría antes. Muy triste, buen trauma», expresó el mismo Lara durante su discurso el día de su graduación ante el público presente.

Pese al pronóstico negativo de los médicos, este joven logró cumplir su sueño: graduarse de Psicología. Durante su discurso en la Universidad de Nebrija, Lara contó todo su recorrido por la enfermedad y animó a sus amigos y compañeros a vivir la vida, luchar por su sueños y a «reírse más.

Tras despertar

Lara «milagrosamente» despertó y a partir de allí trabajó mucho para poder hablar de nuevo y, cuando algunos médicos le preguntaron qué iba a hacer con su vida, el joven respondió claramente que él quería volver a la universidad. Sin embargo, asegura que, cuando dijo esto, los galenos le advirtieron que ese camino era, prácticamente, una ‘utopía’.

«Me miraron con cara de pena y me dijeron que no apuntara tan alto ya que, como mucho, podría cambiarme de la cama a la silla por mí mismo. Bueno, pues quiero que sepáis que, a veces, los sueños se cumplen pero que, para ello, hay que perseguirlos mucho», añadió.

Este duro golpe de la vida le enseñó a Santiago Lara que cada uno tiene su función en la vida. En el caso del joven era que a través de una sonrisa ayudaría a los demás.

“Me di cuenta de que el mío era sacar sonrisas, ayudar a los demás. La vida hay que vivirla, hay que reírse», dijo.

En su camino por la universidad, logró publicar el libro ‘Órdago a la vida’, un texto que permite conocer el recorrido de su historia en el que Lara cuenta las conclusiones positivas que ha sacado de la enfermedad y cómo se puede crecer personalmente tras una situación de tanta dureza, encontrar el rumbo de la vida y mejorar como persona.

Jóvenes como Santiago demuestran que, con esfuerzo y determinación, es posible superar grandes obstáculos y servir de inspiración para los demás.

“Los sueños se cumplen, solo hay que perseguirlos mucho mucho mucho”, finalizó Santiago Lara.